Mauricio Macri realizó este lunes por la noche una evaluación de la gestión de Javier Milei y reconoció que el Presidente realizó «un milagro» junto al ministro de Economía, Luis Caputo, al desactivar la «bomba atómica que habían dejado (Sergio) Massa, (Alberto) Fernández y Cristina (Kirchner)». De hecho, describió ese escenario de transición como «una situación de post guerra«.
«La confianza la da un sistema económico que el Gobierno, hay que reconocer, ha hecho un milagro«, remarcó el expresidente en una entrevista que concedió en TN. Y amplió: «Era prácticamente imposible evitar una hiperinflación y ellos lo lograron. Eso hay que reconocerlo».
En esa dirección, expresó que «todo lo que prometió el ministro Caputo y está funcionando» es la vía para sacar al país de ese lugar «de jaque mate» y de «crisis terminal» en el que estaba, de acuerdo a su consideración.
De todas maneras, Macri se reservó un espacio para realizar una observación acerca de «una parte opinable» del plan de Gobierno de Milei, con el que tiene «una excelente relación humana», según destacó. Lo que mencionó fue si es «sostenible o no el valor del dólar», no así, de momento, el cepo cambiario.
«Hoy el riesgo país está bajando y Argentina está estable, lo que no significa que la gente esté viendo resultados, porque el mercado llega hoy y la inversión llega dilatada en el tiempo», advirtió Macri.
Y añadió, siempre propenso a la comparación futbolera: «Milei al mercado le está ganando 10 a 1, con la inversión real estamos perdiendo 8 a 2. Salvo minería y Vaca Muerta, el resto está en actitud pasiva de ver qué va a pasar».
De todos modos, Macri sostuvo que “la estabilidad de las reglas no la da un presidente solo ni un ministro de Economía inspirado, la da el conjunto, que se llaman instituciones”.
“Necesitamos convencer al que pone la fábrica y necesita diez años para recuperarla. Tenemos que convencer a ese personaje que todavía está en actitud pasiva”, insistió en la figura el actual presidente del PRO, partido aliado de la gestión Milei.
Y en esa línea de fortalecer las instituciones, afirmó que “el Gobierno tiene una oportunidad de mejora monumental, que la está perdiendo, porque los nombramientos en muchos ha habido cuestionamientos”.
“Es fundamental que los jueces no generen debate, que la mayoría diga que un juez le da tranquilidad», sostuvo Macri sin mencionar su evidente e insistente referencia al rechazo al pliego para la Corte Suprema del polémico juez Ariel Lijo.
Pero Macri puntualizó más: «No puede ser que se nombra a una gente para AFIP y la Aduana, y salen cuestionamientos, se nombra a alguien en el segundo nivel de la UIF y se dice que no tiene antecedentes para estar ahí. Son oportunidades perdidas”, agregó.
Macri no hizo nombres propios pero sus referencias eran claras a la designación de Andrés Vázquez en la Dirección General Impositiva (DGI) y la propuesta de que Santiago Martín González Rodríguez secunde la Unidad de Información Financiera (UIF). Dos nombres surgidos de la mano de Santiago Caputo, el asesor presidencial con quien Macri mantiene aún sus reservas.
ES/DS