Familiares y amigos de los tres trabajadores de la compañía New American Oil (NAO), que fallecieron en la explosión y posterior incendio de un tanque en la destilería de Plaza Huincul, volverán a reclamar justicia por Fernando Jara, Gonzalo Molina y Víctor Herrera, a 22 meses de la tragedia, ocurrida el 22 de septiembre de 2022. Desde las 16 horas de este domingo, 21 de julio, se reunirán en la Plaza San Martín y dejarán 22 rosas blancas, “para seguir difundiendo el pedido de justicia”, informaron.
La investigación judicial, que se inició luego de la trágica explosión en la refinería de Plaza Huincul, tiene a siete personas imputadas, esperando la realización del juicio oral. En la audiencia de formulación de cargos, que se realizó en el mes de marzo de 2023, resultaron acusados el gerente general de NAO; el jefe de planta; el responsable de mantenimiento y el jefe de producción; dos responsables de seguridad e higiene y un auditor externo de la empresa.
Dos de los acusados, enfrentan la imputación por estrago culposo mientras que los otros cinco, serán juzgados por el delito de estrago doloso, en todos los casos en calidad de autores. En la publicación para convocar a la movilización, los familiares remarcaron el pedido a los vecinos para que acompañen la iniciativa y “los recuerden siempre, para que no se olvide lo que ocurrió” aquel 22 de septiembre de 2022, a las 4 de la madrugada, cuando una explosión en la refinería de NAO, causó la muerte de los tres operarios.
Las pericias, revelaron que el fuego pasó de la zona del tanque y alcanzó a seis camiones que se encontraban en el predio que ocupa la compañía, en el parque industrial y demandó la intervención de quince dotaciones de bomberos de Cutral Co, Centenario y Plottier y la asistencia de personal de la destilería de YPF y otras empresas ubicadas en predios cercanos.
Durante la audiencia de formulación de cargos, la fiscal del caso, Sandra González Taboada, señaló que las instalaciones eléctricas en la destilería, “no eran adecuadas, había muchas anomalías y no se encontraban aptas”. “No se garantizó la seguridad de las operaciones”, afirmó la fiscal y aseguró que en la planta “se realizaban operaciones de alto riesgo”.