Ya es un hecho: el sistema de fotomultas en la ciudad de Neuquén comenzó a funcionar y el municipio anunció que a partir de este lunes, 10 de junio, se comenzará a cobrar las infracciones registradas. El periodo de prueba había iniciado el pasado 4 de junio y ya llegó a su etapa final.
El subsecretario de Medio Ambiente y Protección Ciudadana, Francisco Baggio, informó que ahora se le dará lugar a la etapa contravencional, y aseveró que este sistema de cámaras tiene como objetivo «mejorar la siniestralidad vial en la ciudad”. Sin embargo, esta iniciativa puesta en marcha por el municipio ha recibido críticas de varios sectores de la sociedad.
El funcionario detalló que ya hay instaladas 46 fotomultas en distintos semáforos de la capital neuquina, y comentó que la idea en esta primera etapa es colocar 100. “Este sistema no es un radar ni una manera de captar exceso de velocidad”, aclaró.
Las cinco contravenciones más importantes y peligrosas que captarán las fotomultas son: cruzar el semáforo en rojo, invadir la senda peatonal, el uso del teléfono celular al conducir, la falta de uso de cinturón de seguridad y el estacionamiento en doble fila o el giro en U.
Desde el municipio explicaron que el sistema trasmitirá, en tiempo real, las filmaciones que se registren en los semáforos a un centro de monitoreo donde los inspectores determinarán qué acción puede ser tomada como una contravención. Para esto, deberán desgrabar las imágenes para chequear de forma fehaciente. Se generarán archivos de 10 fotos y un video de 3 segundos.
“Todo el proceso de un evento contravencional lo valida un inspector de tránsito, decide si una imagen o video se convierte en una multa”, indicó Baggio y destacó que “siempre es garantizando el derecho de defensa del vecino en el Juzgado de Faltas”. En cuanto al valor de las infracciones, indicó que van de los 80 mil pesos a los 500 mil pesos.