El Gobierno argentino ha dado un paso significativo en el desarrollo energético del país al oficializar la adhesión del multimillonario proyecto para Vaca Muerta al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI). Esta medida, formalizada a través de la Resolución 302/2025 publicada en el Boletín Oficial, busca potenciar la capacidad de exportación de petróleo y consolidar a Vaca Muerta como un pilar estratégico de la economía nacional.
El proyecto del Gobierno, denominado Vaca Muerta Oleoducto Sur (VMOS), implica una inversión inicial de 2.900 millones de dólares y está liderado por un consorcio de empresas que incluye a YPF, Pan American Energy, Vista Energy, Pampa Energía, Pluspetrol, Shell y Chevron.
Este consorcio tiene como objetivo construir un oleoducto de 437 kilómetros que conectará los yacimientos de Vaca Muerta en Neuquén con una terminal de carga y descarga en Punta Colorada, Río Negro. Además, el proyecto contempla la instalación de monoboyas interconectadas y una playa de tanques para el almacenamiento de petróleo.
El VMOS permitirá transportar hasta 550.000 barriles de petróleo por día, con la posibilidad de incrementar esta capacidad a 700.000 barriles en el futuro. Según estimaciones oficiales, esta infraestructura generará exportaciones anuales superiores a los 15.000 millones de dólares, consolidando a Vaca Muerta como un motor clave para la economía argentina.
El Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) fue creado para atraer inversiones nacionales y extranjeras en sectores estratégicos como el petróleo y el gas. Este régimen ofrece beneficios fiscales y garantías de estabilidad jurídica, lo que lo convierte en una herramienta fundamental para fomentar el desarrollo de proyectos de gran envergadura.
En el caso del VMOS, la adhesión al RIGI asegura un marco de previsibilidad que facilita la ejecución del proyecto y refuerza la confianza de los inversores. La oficialización de este proyecto no solo representa un avance en términos de infraestructura energética, sino que también tiene un impacto significativo en la generación de empleo y en el desarrollo regional.
Construcción
Se estima que la construcción del oleoducto y las instalaciones asociadas generará miles de puestos de trabajo directos e indirectos en las provincias de Neuquén y Río Negro. Además, el aumento en la capacidad de exportación contribuirá a mejorar la balanza comercial del país y a fortalecer las reservas internacionales.
El VMOS es considerado la obra de infraestructura más importante del país en la última década y un paso crucial para posicionar a Argentina como un actor relevante en el mercado energético global. Con una fecha estimada de finalización en abril de 2026, el proyecto promete transformar la capacidad de producción y exportación de Vaca Muerta, consolidando su rol como uno de los yacimientos de shale oil más importantes del mundo.
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