OpenAI, propietaria de ChatGPT, acusa a su rival chino DeepSeek de utilizar sus modelos de aprendizaje para desarrollar su propia inteligencia artificial.
La compañía de Sam Altman afirma haber hallado pruebas de que la empresa china utilizó sus modelos patentados para entrenar a su propio competidor de código abierto, revela este miércoles el medio económico británico ‘Financial Times’ (FT).
En medio de las inquietudes sobre una posible violación de la propiedad intelectual, el fabricante de ChatGPT dijo que había visto alguna evidencia de «destilación» (transferencia de conocimientos), que sospecha que proviene de DeepSeek.
La destilación es una práctica común en esta industria, pero la preocupación es que DeepSeek pudiera estar haciéndolo para construir su propio modelo rival, lo que es una violación de los términos de servicio de OpenAI, empresa con sede en San Francisco.
«El problema es cuando (lo sacas de la plataforma y) lo estás haciendo para crear tu propio modelo para tus propios fines«, dijo una persona cercana a OpenAI.
Los términos de su servicio establecen que los usuarios no pueden copiar ninguno de sus servicios ni utilizar los resultados para desarrollar modelos que compitan con OpenAI.
Según reportes, Microsoft también está verificando si los datos de OpenAI han sido utilizados sin autorización.
El zar de inteligencia artificial de la Casa Blanca, David Sacks, ya había planteado la posibilidad de que DeepSeek robe la propiedad intelectual de compañías norteamericanas.
«Hay una técnica en IA llamada destilación… donde un modelo aprende de otro modelo (y) de alguna manera absorbe el conocimiento del modelo maestro«, dijo Sacks a Fox News.
«Y hay evidencia sustancial de que lo que hizo DeepSeek aquí fue destilar conocimiento de los modelos de OpenAI, y no creo que OpenAI esté muy contento con eso«, agregó Sacks, sin proporcionar evidencia.
La Casa Blanca, en alerta por el crecimiento de DeepSeek
Mientras tanto, los funcionarios estadounidenses están sopesando las implicaciones de seguridad nacional de la aplicación de inteligencia artificial china DeepSeek. Lo afirmó la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
«Hablé con (el Consejo de Seguridad Nacional) y están analizando cuáles podrían ser (las implicaciones para la seguridad nacional)», dijo Leavitt.
Según CNBC, la Marina de Estados Unidos envió un correo electrónico a su personal advirtiéndoles que no usaran la aplicación DeepSeek debido a «posibles preocupaciones éticas y de seguridad«.
Por otro lado, los chips de Huawei, no sólo los de Nvidia, también se utilizan para la IA de DeepSeek. Un denunciante reveló al sitio especializado Gsm Arena que detrás del trabajo que realiza la IA china se encuentra un chip conocido como Ascend 910C de Huawei.
Esta sería la tarea de la actividad de inferencia del modelo, es decir, generar respuestas a las preguntas de los usuarios. El entrenamiento, según la información oficial, se lleva a cabo en una unidad de procesamiento Nvidia H800, una versión limitada para China del modelo más potente H100.
En ambos casos, el hardware no es de última generación pero, sin embargo, permite a DeepSeek alcanzar el rendimiento de ChatGPT y otros modelos más renombrados que se basan en hardware más potente.
La noticia de la participación de Huawei, si se confirma, representaría una prueba importante de la voluntad del grupo con sede en Shenzhen de involucrarse aún más profundamente en el campo de la inteligencia artificial.
Durante una cumbre en abril pasado, Huawei describió su estrategia de inteligencia artificial a largo plazo, que también incluye el desarrollo de un nuevo asistente inteligente para dispositivos móviles. Según Gsm Arena, Huawei también está cerca de lanzar los chips 920C que pretenden competir con el Blackwell B200, el principal hardware de Nvidia para operaciones de inteligencia artificial.
SL