Sin despertar mayor sospecha, una banda de ladrones dejó vacío un local de venta de tenis en el reconocido sector de outlets (tiendas de descuentos en el barrio Toberín, ubicado en el norte de Bogotá).
Los hechos se conocieron la mañana del 4 de diciembre de 2024 gracias a varios videos que se hicieron virales en redes sociales y en grupos de difusión, y en donde se observa cómo los delincuentes, literal, se ‘hicieron su agosto’ (término que se usa en Colombia para referirse cuando los ladrones logran obtener su botín) tras llevarse todas las cajas de tenis de la tienda Adidas.
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Este hurto, según lo que pudo confirmar Infobae Colombia, se presentó durante la madrugada del domingo primero de diciembre de 2024, momento en el que la funcionaria de la empresa de seguridad que se hallaba prestando el servicio durante ese turno, y según lo que indicó el audio del testimonio que se conoció con el video y las fotos, la guarda de seguridad pecó de confiada, porque a pesar de reportar ruidos extraños, no fue a mirar qué estaba ocurriendo, y se fue a dormir.
En total fueron cerca de cuatro horas las que duró la siesta que tomó la mujer encargada de prestar el servicio de seguridad, tiempo que aprovecharon los delincuentes para dejar vacía la tienda que es reconocida por la venta de calzado deportivo e informal, y cuyos precios no son nada bajos. Esto se refleja en el valor al cual asciende la millonaria cifra del hurto: dos mil millones de pesos.
El hurto se produjo por esta zona del barrio Toberín, conocida por ser una zona comercial de outlets:
Así fue como banda de ladrones robó tienda de Adidas en Bogotá
Como si fuera un robo de película, que requirió de una planeación meticulosa por parte de la banda de ladrones, compuesta por cuatro personas, y de la adquisición de herrramientas para poder llevar a cabo la misión.
Los detalles que se conocieron tras el audio que se dio por parte de los superiores de la empresa de seguridad que presta el servicio, deja a la vista que además de la inventiva de los ‘pillos’ (como también se les dice en el país a esta clase de delicuentes), también dejó en evidencia una situación que es usual en varios escenarios, no solo en tiendas de comercio, sino en conjuntos residenciales y hasta en las mismas garitas (como se les conoce a las casetas donde los guardas pernoctan), los encargados de prestar el servicio de seguridad se toman siestas.
En muchas ocasiones, las personas que prestan los turnos no tienen novedades, pero en este caso, la guarda de vigilancia que tenía el turno durante la noche del sábado 30 de noviembre y la madrugada del domingo 1 de diciembre, si escuchó una novedad en principio, y la reportó a sus supervisores, según lo que se conoció dentro del testimonio del audio por parte de la empresa de seguridad.