La construcción de cuatro viviendas que tocan el paso sobre el puente de Ignacio Rivas y el Arroyo Durán provocan un zigzagueante recorrido para los automovilistas. Las familias que las habitan serán reubicadas y las casas que habitaban serán demolidas con el fin de dar fluidez a la calle Ignacio Rivas.
En el marco de un plan macro de sistematización del Arroyo Durán, esa irregularidad será subsanada. «Venimos trabajando hace más de un año en conjunto con la UPF para poder llegar a la reubicación de este sector porque, en realidad, de la reubicación de esas cuatro familias depende seguir adelante con el financiamiento para la sistematización del Arroyo Durán», explicó Marco Zapata, presidente del Instituto Municipal de Urbanismo y Hábitat, en una nota radial por «LU5».
“Fue necesario que nosotros buscáramos un lugar que cumpliera con los requisitos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), quien financia la obra; y el lugar que encontramos –para la reubicación– es una reserva fiscal desafectada desde hace ya más de tres años por una ordenanza municipal, con la cual estuvo de acuerdo el titular del dominio«, agregó.
El funcionario contó que “ya está en marcha la construcción de las cuatro viviendas que serán adjudicadas a las familias reubicadas en un plazo estimado de seis meses”. “Es necesario lograr el objetivo por dos razones; la primera, seguir adelante con la sistematización del Arroyo Durán, trabajo que se realiza también con la intervención del personal de Recursos Hídricos de la Provincia. La segunda, garantizar la movilidad norte-sur de la ciudad”, aseguró.
El lugar donde se terminan de construir los dúplex para estas familias está en la zona de las 144 Viviendas, sobre calle Río Senguer. Tienen 73 metros cuadrados y se edifican con fondos del Estado provincial obtenidos mediante un convenio con la UPF.
El convenio se rubricó en la sede de la Defensoría del Pueblo ante la presencia de las familias.