Un colectivo de la línea 20 del COLE hundió sus ruedas traseras en el interior de una boca de tormenta que colapsó producto de una pérdida de agua, en la esquina de Tronador y Copahue del barrio Confluencia Rural. El incidente ocurrió alrededor de las 7 de la mañana del lunes, 20 de mayo, y según afirmaron, “no hubo heridos, pero motivó que el tránsito permaneciera habilitado solamente en media calzada”.
El colectivo del ramal 20 circulaba por la calle Copahue y al llegar a la intersección con la calle Tronador, quedó con gran parte de sus ruedas traseras dentro de la boca de tormenta, en la que se produjo un cráter por una pérdida muy importante de agua. Operarios del EPAS llegaron hasta el lugar para determinar si se trató de un caño de cloacas, un desagüe pluvial o una fuga de agua potable.
Los pasajeros que transitaban en ese momento a bordo del colectivo interno 112 de la línea 20 debieron realizar un trasbordo a otra unidad para continuar el viaje a sus respectivos destinos. Según estimaron, el colapso de la boca de tormenta se habría dado por una pérdida de agua potable, que provocó un escurrimiento por debajo de la carpeta asfáltica, que no soportó el peso del ómnibus y se rompió hundiendo las ruedas traseras en el cráter.
La presidenta de la comisión vecinal del barrio Confluencia Rural, María Eva Arriagada, aseguró que los vecinos denunciaron una pérdida de agua alrededor de las 5:30 de la mañana. Sin embargo, manifestó que “hace varios años vienen señalando la existencia de otro pozo, de similar tamaño, en calle Tronador a una cuadra de Chocón”.
Según relató a medios locales, desde la entidad ya realizaron el reclamo, pero a pesar de las promesas, “nunca acudieron a taparlo”. Anticipó que en la mañana de este martes, 21 de mayo, presentará una nota en el municipio para que avancen las obras de reparación.