“Nuestro Gobierno quiere corregir este rumbo decadente en el que está inmersa la Argentina”, dijo este jueves el vocero presidencial Manuel Adorni. Y consideró que el paquete de medidas que el presidente Javier Milei envió ayer al Congreso “se enmarca dentro de la peor herencia recibida por un gobierno en la historia argentina”. El país “atraviesa una situación de extrema emergencia”, reforzó.
“Hay gente que no está dispuesta a cambiar y que está dispuesta a poner palos en la rueda”, sostuvo y aseguró que el objetivo del gobierno es “evitar la catástrofe”. “Queremos un país que tenga un Estado limitado, que gaste poco y que solo se financie con impuestos bajos, ni con emisión ni con deuda. Un Estado que deje de molestar a sus ciudadanos y los deje contratar, producir, comerciar, exportar e importar como mejor lo crean”, dijo.
“La Ley se enmarca dentro de la peor herencia recibida por un gobierno en la historia argentina, con 15 puntos de déficit fiscal entre el Tesoro Nacional y el Banco Central, precios reprimidos en prácticamente toda la economía, un Banco Central sin reservas, un Estado sin confianza, sin crédito y atravesando una inflación en torno al 1% diario, lo que nos encuadra en un proceso hiperinflacionario, y estamos tratando de evitar el peor de los desenlaces”, señaló.
“Además tenemos indicadores que asustan en materia educativa, social, de seguridad y en nuestro esquema de salud. Nadie puede dudar de que efectivamente Argentina atraviesa una situación de extrema emergencia”, dijo.