Cuando el martes el Gobierno liberó las importaciones, dando de baja el sistema SIRA que había ideado la gestión de Sergio Massa, en las redes los usuarios empezaron a ilusionarse con la posibilidad de volver a hacer compras puerta a puerta en Amazon, AliExpress, eBay o cualquier sitio del exterior sin tener que embarcarse en trámites, pagar impuestos o calcular el costo para no pasarse del tope actual de US$ 1.000 por envío.
Pero la resolución 5466/2023 de la AFIP y la Secretaría de Comercio que crea el nuevo Sistema Estadístico de Importaciones (SEDI), en donde solo habrá que informar la importación sin necesidad de esperar ninguna aprobación, dejó específicamente afuera a las «mercaderías ingresadas bajo el régimen de Courier o de envíos postales», con lo cual, por ahora nada ha cambiado.
Sin embargo, desde el área de la Secretaría de Comercio que está desarmando la burocracia en torno a las importaciones, aseguraron que «vamos a estar trabajando en la revisión de todos los regímenes que no van por los despachos generales, como courier, puerta a puerta, pequeños envíos».
Y agregaron: «Se van a revisar condiciones, limitantes y seguramente haya modificaciones en breve. Pero lo estamos empezando a trabajar y pronto va a haber novedades».
Actualmente, y después de que en 2022 se bajó desde US$ 3.000, el tope para ingresar bienes del exterior vía courier es de US$ 1.000 por destinatario y por vuelo. No se puede traer en un mismo avión varios paquetes para la misma persona que juntos superen ese valor máximo.
Por Courier se pueden recibir hoy hasta cinco envíos anuales, cada uno de los cuales puede pesar hasta 50 kilos y contener no más de tres unidades de la misma especie (por ejemplo, un máximo de tres remeras o de tres termos).
Si la compra se hace a través del Correo Argentino, se puede traer hasta US$ 3.000. Se paga un impuesto de 50% sobre el excedente de US$ 50. Pero suele tardar más tiempo en llegar.
NE